Hubo un momento en que creíste que la tristeza sería eterna,
pero volviste a sorprenderte de tí mismo riendo sin parar.
Hubo un momento en el que dejaste de creer en el amor; y luego apareció esa persona y no pudiste dejar de amarla cada día más.
Hubo un momento en que la amistad parecía no existir; y conociste a ese amigo que te hizo reír y llorar, en los mejores y peores momentos.
Hubo un momento en el que una pelea prometía ser eterna; y sin darte cuenta terminó en un abrazo.
Hubo un momento en que un examen parecía imposible de pasar; y hoy es un examen más que aprobaste.
Hubo un momento en el que creíste que nadie podía comprendente y te quedaste sorprendido mientras alguien parecía leer tu corazón.
Así como hubo momentos en que la vida cambió en un instante, nunca olvides que aún habrá momentos en que lo imposible se tornará un sueño hecho realidad.
¡Nunca dejes de soñar, porque soñar es el principio de tus proyectos hechos realidad!